La gordofobia y su impacto en la sociedad

La gordofobia es un tema que genera efectos importantes en la autoestima, pero que también provoca ciertos cambios en el modo en que las personas se comunican. Se trata de un problema que, con el paso de los años, ha ganado más relevancia, por lo que en este post se va a analizar de forma detallada.

¿Qué es la gordofobia?

Este sesgo automático no es más que un problema existente dentro de la percepción que poseen ciertas personas hacia la apariencia de otras con base en su peso. El simple hecho de que exista una característica física relacionada con el sobrepeso genera una sensación de rechazo automático. Más que un odio sin sentido, se trata de una estructura de pensamiento fomentada en gran parte por la misma sociedad.

En primer lugar, cabe destacar que los estándares de belleza a los que se expone la sociedad actual son una de las principales razones por las que este rechazo existe. Otro elemento de gran influencia en este tema es el auge de las redes sociales. En este sentido, dichas plataformas se han convertido en un estímulo visual muy poderoso que provoca que los prejuicios hacia las personas con sobrepeso se expandan a una gran velocidad.

Por lo general, una persona gordofóbica resta valor a individuos que poseen una masa corporal más elevada de lo normal. Sin embargo, es incapaz de argumentar motivos claros para explicar el porqué. Solamente se basan en la apreciación superficial de lo que ven sin considerar factores como enfermedades hereditarias, problemas metabólicos, etc.

Esta forma errada de pensar genera una discriminación difícil de controlar. Una opinión bastante común en las personas gordofóbicas es la de creer que la obesidad viene provocada por la falta de voluntad.

También puede conllevar consecuencias en la persona discriminada, En este sentido, cabe aclarar que un aumento de peso puede deberse a cuestiones genéticas o a diferentes trastornos físicos. Sin embargo, esto es algo que incluso las propias personas con sobrepeso tienden a ignorar. Es decir, se culpan de su situación, lo que provoca una reducción de la autoestima.

El miedo a la obesidad en la actualidad

Como se mencionaba en líneas anteriores, la gordofobia es uno de los problemas más crecientes a nivel social que, además, se potencia en las redes sociales y medios de comunicación. Dada la masificación de estos canales informativos, los juicios personales se han convertido en un arma sumamente poderosa, y no para bien.

No obstante, el miedo a la obesidad tiene un cierto control por parte de organismos y cuerpos gubernamentales. Un ejemplo de ello es la creación de programas como las Jornadas sobre Gordofobia y la Violencia Estética contra las Mujeres 2020. Estos planes han ayudado a crear una concienciación crucial para resolver esta clase de problemas.

Al emplear estos recursos, los sesgos y prejuicios se reducen gracias a la utilización de campañas de información para cumplir tal objetivo. La redacción de SInFiltros cree que labores como esta deben seguir implementándose para garantizar un campo de convivencia sano en todos los sentidos. Por ejemplo, empresas como Victoria’s Secret han optado por luchar contra este rechazo incluyendo modelos de talla grande en sus revistas. Sin duda, estas iniciativas son fundamentales para resolver este problema.

Por otro lado, no se debe olvidar que este tipo de cambios han de ser ejecutados de forma metódica y progresiva, ya que las modificaciones drásticas en el pensamiento de las masas suelen generar reacciones negativas a corto plazo. En este sentido, se estima que este tema deberá ser tratado, al menos, durante los próximos 10 años.

¿A quién afecta más?

Para entender esta problemática desde una perspectiva más personal, es necesario estudiar los puntos de vista de las personas afectadas. Se puede explicar el efecto del miedo a la obesidad de la siguiente forma:

  • La persona gordofóbica. Además de sentir incomodidad al observar personas gordas, ella misma puede verse afectada. ¿Por qué? Simple, el rechazo a subir de peso genera una sensación de disconformidad con el aspecto personal. Es decir, basándose en este sesgo, el individuo gordofóbico tiende a ser muy estricto con su alimentación y estilo de vida. Esto deriva en un miedo constante a engordar que puede transformarse en una alteración psicológica. Incluso se producen cuadros de depresión a causa de cualquier cambio en el cuerpo.
  • La persona discriminada. Los individuos con un peso mayor son el centro de comentarios y opiniones negativas. Al no poseer la capacidad de poder explicar su condición, las interacciones sociales disminuyen de forma considerable. En ocasiones, la idea de conversar con alguien en persona resulta una tarea imposible. Esto reduce la autoestima y conlleva cuadros depresivos en algunos casos.

¿Cómo luchar contra el miedo a la gordura?

El aumento de peso puede estar provocado por factores genéticos que escapan del control del afectado. Además, enfermedades metabólicas o digestivas son elementos que influyen en el crecimiento de la grasa corporal. Siempre es necesario tener en cuenta estos puntos a largo plazo, ya que ayudarán a mejorar la forma en que una persona con sobrepeso se observa a sí misma.

Para combatir este rechazo sin sentido, resulta muy recomendable seguir las siguientes recomendaciones:

  • Evitar la propagación y promoción de la cultura de las dietas «milagrosas».
  • No utilizar las palabras gordo o gorda como términos despectivos o insultantes.
  • Hablar sobre salud integral y el cuidado personal.
  • Conversar sobre la alimentación desde una perspectiva amplia.
  • Señalar cualquier acto de discriminación o de bullying gordófobo.
  • Impulsar el deporte inclusivo.
  • Visibilizar la diversidad corporal en términos generales.
  • Eliminar el juicio superficial al observar a cualquier persona.
  • Construir un plan de inclusión laboral y social para individuos con alto peso corporal.
  • Escuchar a las personas con sobrepeso para comprender sus inquietudes y preocupaciones,

Una vez que se estudien todos los puntos antes mencionados, problemas como la gordofobia serán mucho menos frecuentes. Sin duda, el primer paso para resolver cualquier dificultad es entender su origen. De esta manera, la estructuración de una sociedad sana resultará mucho más sencilla con el paso del tiempo.

Julia Puentes